Puro vicio, esta tarta es puro vicio. No es otra
tarta de queso más, os aseguro que si la probáis querréis repetir una y otra vez. No os dejéis asustar ni por la palabra coffee ni por el número de calorías... el café ni se nota, potencia más si cabe el sabor a chocolate, el número de calorías... la vais a compartir ¿no?
Hace unos meses publicaba la
tarta de queso con cobertura de chocolate y aunque guardan alguna similitud, ¡zas! ésta va y nos sorprende con la base de galletas con chocolate, el café, la vainilla, esa cobertura con nata fresca...
De todos modos, es requisito imprescindible que cualquier cosa que horneemos con estos calores esté de lujo porque así compensamos el bochorno de la cocina y el buen rato que se tira en el horno. A mi esta tarta de queso de chocolate y café me valió la pena y al resto de mis comensales también. Supera las expectativas.
INGREDIENTES (molde 24 cms. -con uno más pequeño quedaría más bonita y altita-)
base
- 150 gr. de galletas digestive
- 50 gr. de mantequilla
- 15 gr. de cacao en polvo puro sin azúcar
- un chorrito de leche
relleno
- 250 gr. de queso crema
- 250 gr. de mascarpane
- 150 gr. de nata
- 100 gr. de azúcar morena
- 1 cucharada de harina
- 3 huevos
- 1/2 cucharadita de café soluble
- 2 cucharaditas de agua (para disolver el café)
- 1 cucharadita de pasta de vainilla
cobertura
- 15 gr. de mantequilla
- 1 cucharada de nata fresca
- 100 gr. de chocolate negro
- cacao sin azúcar
ELABORACIÓN
- Precalentamos el horno a 170º y forramos la base del molde con papel para horno.
- Trituramos las galletas hasta dejarlas polvo, bien con un robot de cocina o bien metidas en una bolsa de plástico y pasando el rodillo por encima. Añadimos el cacao y la mantequilla derretida y mezclamos bien. Pasamos al molde y con el dorso de una cuchara vamos cubriendo el fondo hasta dejar una superficie lisa y homogénea.
- En un bol ponemos los quesos, la nata, el azúcar, la harina, la vainilla, y el café ya disuelto y batimos bien.
- Incorporamos los huevos uno a uno y cuando estén integrados y la mezcla cremosa la vertemos en el molde y horneamos durante 50 minutos -dependerá del horno-.
- La dejamos enfriar y la metemos en el congelador unas horas. Entonces preparamos la cobertura.
- En un cazo ponemos la mantequilla y la nata a calentar hasta que se derritan, añadimos el chocolate, dejamos fundir y batimos bien. Vertemos la mezcla por encima de la tarta y cuando enfríe espolvoreamos caco al gusto y volvemos a refrigerar. Esta tarta, con muchas otras, está mejor de un día para otro.
Angi